[Live Review] Angelus Apatrida, Thrash Metal de la ostia
La noche del 11 de diciembre fue testigo del regreso de la banda española Ángelus Apatrida a Chile, después de 8 años de ausencia. La banda, originaria de Albacete, es conocida por su técnico Thrash metal con toques modernos, y vino a presentar su última placa, “Aftermath” de 2023, en el mítico RBX de la comuna de Ñuñoa.
La carrera de Ángelus Apatrida es impresionante, con 8 discos de larga duración y con más de 20 años de trayectoria en la escena metalera española (y mundial porque no decirlo) , que tradicionalmente ha sido más rockera y heavy metal. Sin embargo, la banda ha logrado hacerse un lugar en la escena con su propuesta distinta y perseverante abriéndose camino, pero con respeto como se dice.
Para abrir los fuegos de esta fecha, se eligieron a las bandas nacionales Abreaktion y Old Force, que están pasando por un momento muy bueno dentro de la escena Thrash chilena. Fue un acierto elegirlas para esta ocasión, ya que demostraron ser verdaderos representantes de nuestro underground.
A las 19:50, Abreaktion subió al escenario y nos mostró un Thrash metal aguerrido y distinto, con un gatilleo que los hace diferentes al resto de las bandas de la escena. La voz de su vocalista Ignacio Cortés fue impresionante, logrando alcanzar altos y bajos con facilidad, y mostrando una propuesta distinta al resto de las bandas de la escena nacional. Con temas como Fast Epidemic, Pyromaniac, Mental Torture, Amnesia Chronicle, Empty Promises y cerrando con Nation, repasando la mayoría de los temas de su último trabajo titulado “Bornhatred” del año 2024 y temas que ya están din editar pero presentes en el inconsciente de los bangers, la banda demostró su poderío y exportabilidad (de hecho su última placa salió a través de Chaos Records de México) . Sin duda, Abreaktion dejó huella en el público y demostró que la escena chilena tiene mucho que ofrecer.
Siguiendo con el ataque de thrash en este miércoles, es el turno de Old Force subiéndose al escenario a eso de las 20:40 aproximadamente, estos maniacos del Thrash Metal más Bay Area y con mucha calle, con una tremenda puesta en escena prendiendo rápidamente al público y a sus seguidores que llegaron (los cuales no eran pocos) mostraron haciendo un repaso de sus ya quince años en escena con temazos tales como Feel the Pain, Time Crushes False Ones, Psycho Mind, Visions Contradictions And Addictions, Future Guests y cerrando una redonda presentación con The Warning, dejaron bien en claro de que están hechos estos hijos del moshpit, tremendos!!!
Ya aparecen en escena a eso de las 21;30 estos “ángeles sin patria” enarbolando el estandarte del Thrash Metal, liderados por los hermanos Jose en bajo y Guille Izquierdo en guitarra y voz tirando como se dice “toda la carne a la parrilla” y desde la entrada una buena interacción con el público logrando una química metálica que no se puede describir fácilmente, ellos muy humildes pero sádicos al momento de interpretar estos verdaderos ataques directos a la yugular mostrando el poder de un setlist destructivo, con temas tales como; One of Us, Snob, Indoctrinate, Cold, Vomitive, Of Men and Tyrants, We Stand Alone, Violent Dawn, Give ‘Em War, Sharpen the Guillotine, Serpents on Parade y cerrando esta tremenda presentación con You Are Next; quiero destacar también la perfecta ejecución de la bateria a cargo de Víctor Valera quien proporciona la base de toda esta destrucción masiva y del gran David G. Álvarez en guitarra líder el cual incluso se bajó a tocar en medio del moshpit, si esto no es impregnarse del publico entonces que es, además que la banda llevan tocando juntos desde más de 24 años lo que hace con estos “hijos de la capital manchega” una verdadera máquina, exacta y poderosa expeliendo buen metal; no es casualidad de que el prestigioso sello discográfico Century Media los fichó hace muchos años. Fue una noche donde cada riff, cada grito y cada golpe de batería resonaron como una declaración de guerra: el Thrash está más vivo que nunca. Ángelus Apatrida demostró por qué son una máquina imparable, entregando no solo música, sino un manifiesto de perseverancia, técnica y pasión. Las bandas nacionales Abreaktion y Old Force dejaron claro que Chile tiene soldados de primera línea en esta batalla metálica, capaces de enfrentarse a cualquier escenario del mundo.
Cuando las luces se apagaron y el sudor aún caía de los cuerpos de los asistentes, una sola cosa quedó grabada en las mentes de todos: el Thrash metal no solo es música, es un estilo de vida que trasciende fronteras, épocas y generaciones. Esa noche, Ñuñoa no fue solo una comuna de Santiago, fue la capital del Thrash mundial, un templo donde los riffs fueron la plegaria y el moshpit, el altar.
¡Larga vida al Thrash! ¡Larga vida al Metal!
Review por Octavio Ramos A.
Fotografías gentileza de: Rubén Gárate