[Live Review] THE METAL FEST 2025: Una lección de sonido y metal que no debe terminar
Domingo 11 de Mayo 2025 Movistar Arena
Nuevamente estamos frente a una nueva jornada del THE METAL FEST en su versión 2025, pero lo vemos con una sensación un poco extraña. Si bien es cierto que es el festival más importante en la historia del metal en Chile, el cual ha reunido bandas de primer nivel dentro de la escena mundial y ha convocado a muchísima gente en versiones anteriores, en esta ocasión, al parecer, no fue lo esperado. Factores importantes son la intensísima oleada de bandas en estas últimas semanas —bandas importantes, de renombre— y un festival de primer nivel también como lo fue el MASTERS OF ROCK pisándole los talones, responsables invisibles de que esto tuviera una baja en las ventas… ¿pérdida de interés? No lo creo.
Esta nueva edición, como de costumbre, en el excelentísimo MOVISTAR ARENA, la casa del festival desde su primera versión, convocó a bandas de renombre tales como KERRY KING (el nuevo proyecto del guitarrista líder de los míticos SLAYER, cosa que no es menor), a la leyenda de la NWOBHM, los incombustibles SAXON, a las máquinas de destrucción masiva del Death Metal mundial como lo son CARCASS y NILE, a una leyenda viviente como lo es VOIVOD (quienes ya se han repetido el plato anteriormente), a otra leyenda inglesa como lo son PARADISE LOST y cerrando el cartel, los suecos de SABATON, completando así un cartel internacional digno de festivales europeos. Todo esto, acompañado de la más variada cartelera de bandas nacionales que lo dieron todo en esta versión. Ahora veremos los pormenores de lo que fue esta jornada inolvidable de camaradería y música extrema del primer corte.
DEVIL STAGE
A eso de las 13:45 saltan en escena los sonidos del inframundo del antiguo Egipto con los norteamericanos NILE, liderados por su guitarrista y fundador Karl Sanders (¿tendrá parentesco con el rey del pollo frito?), mostrando su poderío y exquisita técnica en la ejecución. Acompañado en las percusiones por el maestro George Kollias, en el bajo por Dan Vadim Von (actual Morbid Angel) y en guitarra y voz por Brian Kingsland, nos llevan a atmósferas intensas relatando historias e invocaciones de antiguas deidades, sumergiéndonos en un oscuro paseo por el mítico Valle de los Reyes que ni el mismo Howard Carter hubiese hecho mejor.
Con invocaciones tales como: Stelae of Vultures, To Strike With Secret Fang, Sarcophagus, Sacrifice Unto Sebek, Kafir!, Vile Nilotic Rites y Black Seeds of Vengeance, mostraron un par de temas de su última placa titulada The Underworld Awaits Us All, además de un repaso de su extensa discografía y de la rica historia de una cultura llena de misticismo y oscuridad como lo es el antiguo Kemet.
A eso de pasadas las 14:45, salta en escena otra de las bandas clásicas de la escena mundial: los canadienses VOIVOD, liderados por el carismático Denis Bélanger, más conocido como Snake, en voces. Lo acompañan Chewy en guitarra, Rocky en bajo y uno de los fundadores de la banda, el gran Away, en batería. Presentaron un repaso de su antigua etapa, acompañado de imágenes de fondo con un arte bien sórdido pero a la vez muy cautivador, dignas de un hospital psiquiátrico, generando una atmósfera precisa. Nos llevaron a viajar y sumergirnos en su intenso Thrash Metal con sutiles cortes progresivos, pero sin perder la esencia original.
Interpretaron temas como: Experiment, Holographic Thinking, Tribal Convictions, Ripping Headaches, The Unknown Knows, Forgotten in Space, Nuclear War, Condemned to the Gallows, cerrando con el clásico Voivod, dejando claro que están más vigentes que nunca y que aún van por más.
Siendo las 16:35 aproximadamente, fue el turno de PARADISE LOST, histórica agrupación inglesa que no necesita mayores presentaciones. Son uno de los principales precursores de la escuela Doom Metal británica y actualmente hacen algo más cercano al Rock Gótico, sin perder el toque metálico que los caracteriza. Al frente, una de las voces privilegiadas del metal como lo es Nick Holmes, quien, a pesar de ya no usar su definido estilo gutural de antaño, mantiene un tremendo registro vocal. Lo acompañan Greg Mackintosh y Aaron Aedy en guitarras, Steve Edmondson en bajo —miembros fundadores junto a Holmes— y Adrian Erlandsson en batería.
Comenzaron el show con Enchantment proveniente del exitoso Draconian Times (1995), rápidamente cautivando a un público que seguía llegando al MOVISTAR ARENA. Con un sonido pulcro, nos empujaron a una revolución sonora, continuando con temas como: Forsaken, Pity the Sadness, Faith Divides Us – Death Unites Us, mostrando un afiatamiento y complicidad únicos, logrados con casi 37 años de carrera. El punto álgido fue cuando interpretaron Eternal del clásico álbum Gothic (1991), donde Nick Holmes sacó sus guturales de antaño, desatando la locura entre los viejos fans (me incluyo). Siguieron con One Second, The Enemy, As I Die, un cover de Smalltown Boy (de los synth pop Bronski Beat), y cerraron con el clásico The Last Time. Una presentación excelente, sin duda.
Ya pasadas las 18:00 fue el turno de uno de los números más esperados del festival: CARCASS. Verdaderas leyendas vivientes del extremo y sangriento Death Metal, tocado con la exquisita técnica de genios del género como Jeff Walker (voz y bajo) y Bill Steer (guitarra), acompañados por Nippy Blackford en guitarra y Daniel Wilding en batería. Esta alineación demostró que la banda vino a destruirlo todo.
El quirófano tanatológico sonoro abrió con Unfit for Human Consumption (de Surgical Steel, 2013), enloqueciendo al público, que inició el headbanging generalizado (más de alguno terminó con ibuprofeno al día siguiente). Continuaron con incisiones como: Buried Dreams, Incarnated Solvent Abuse, No Love Lost, Tomorrow Belongs to Nobody/Death Certificate, 316L Grade Surgical Steel, Dance of Ixtab. Destacó la pulcritud sonora y una performance que, literalmente, no dejó títere con cabeza: This Mortal Coil, Corporal Jigsore Quandary (clásico de clásicos) y cerraron con la masterpiece Heartwork. Repasaron temas de sus nuevos trabajos, pero centraron el set en el maravilloso álbum Heartwork (1993), sin dejar fuera himnos de Necroticism – Descanting the Insalubrious (1991). CARCASS sigue liderando y siendo leyenda viva del Death Metal.
Ya dan las 19:30, y con puntualidad inglesa, saltan a escena uno de los números más esperados por el público (nuevamente, me incluyo): la leyenda viva del Heavy Metal de la NWOBHM, SAXON. Liderados por el gran Biff Byford, miembro fundador, junto a Brian Tatler en guitarra (sí, el mismo de DIAMOND HEAD, reemplazando al retirado Paul Quinn). Completan la formación: Doug Scarratt en guitarra, el histriónico Nibbs Carter en bajo y la incansable batería de Nigel Glockler. Una alineación que bordea la perfección, llevando al Heavy Metal a un nivel superior con simpleza, maestría y fuerza.
Cabe destacar el registro vocal de Byford, que a sus 74 años mantiene su voz impoluta. El oficio que tienen bandas como SAXON nos lleva a preguntarnos por qué no llegaron más alto que donde están hoy. Quizás estuvieron en el lugar y momento equivocados de la historia.
El setlist fue: Hell, Fire and Damnation (2024), Power and the Glory, Dogs of War, Motorcycle Man, Madame Guillotine, Heavy Metal Thunder, Dallas 1 PM, Strong Arm of the Law, 1066, And the Bands Played On, Denim and Leather, 747 (Strangers in the Night) y Princess of the Night. SAXON, sin duda, fueron los mejores de este THE METAL FEST. Muchos pensamos lo mismo: esta es una banda a la que los años no le pasan. Dieron clases de cómo, pese a la edad, nadie puede jubilarlos ni bajarlos del escenario. ¡LOS MEJORES!
A las 21:00 fue el turno de SABATON. Estos suecos cultivan un Power Metal sin tanto adorno como otras bandas del género, pero muy efectivo. Con muchísimas poleras de la banda entre el público, era evidente por qué estaban presentes. Con temas como: Ghost Division, The Last Stand, The Red Baron, Bismarck, Stormtroopers, Carolus Rex, Night Witches, The Attack of the Dead Men, Resist and Bite (con guiño a Master of Puppets), Primo Victoria, Swedish Pagans, y cerrando con To Hell and Back, SABATON no defraudó al más mínimo banger presente.
Ya son las 22:30 y salta en escena uno de los números más esperados por muchos… KERRY KING. Tener en frente a uno de los fundadores de SLAYER, con una formación de lujo: Paul Bostaph en batería, Kyle Sanders en bajo, Phil Demmel en guitarra y Mark Osegueda (DEATH ANGEL) en voces. Kerry King se veía tan intenso como en su época con SLAYER. Partiendo con Where I Reign, mostró que este proyecto no solo viene a eso, sino que viene a ser un verdadero monstruo de las seis cuerdas.
El show continuó con cortes de su debut From Hell I Rise (2024): Rage, Trophies of the Tyrant, Residue, Two Fists, Idle Hands, cautivando al público con brutalidad y técnica. Llegaron los primeros covers de la noche: Repentless (SLAYER), desatando la locura. Luego: Toxic, Tension, Everything I Hate About You, Disciple (otro de SLAYER), y uno de los puntos álgidos: homenaje a Paul Di’Anno (QEPD), con Purgatory y Killers (álbum Killers, IRON MAIDEN).
Ya con el público rendido ante el Rey Kerry, siguieron con Crucifixation, otro cover de SLAYER: At Dawn They Sleep, Shrapnel, Raining Blood y Black Magic, cerrando como en los viejos tiempos con From Hell I Rise. Una maestría…que permanecen intactas, secundado por una formación de lujo logran un resultado increíble y este resultado la gente lo sintió y reacciono de la mejor manera, un verdadero cierre con broches dorados para este festival.
HELL STAGE
El escenario secundario, ubicado a un costado del MOVISTAR ARENA, fue el encargado de alojar a las bandas nacionales; partiendo con TERMINAL PROSPECT, banda proveniente desde Suecia pero la cual tiene entre sus filas a Sebastián “Chupete” Rojas, de la conocida banda DOGMA; cultivan una interesante propuesta mostrando un Thrash/Death melódico, el cual logró atraer la atención del público presente que comenzaba a llegar al local. Siguiendo con el programa, es turno de DIAMETRAL, banda que cultiva un Groove Metal, quien logró los primeros mosh; haciendo un repaso de su extensa carrera, mostrando una buena ejecución y técnica.
Seguimos con una de las bandas pioneras dentro del Thrash Metal nacional, liderados por su guitarrista Chris Ira (miembro fundador de la banda), nos muestran un Thrash Metal bien ejecutado, esta vez contando con la presencia desde USA de Gary Wayne en las vocales, cantando junto a Leonardo Caballero. Wayne, con un gatilleo vocal similar a Zetro Souza pero con frescura propia, le dio una identidad distinta a este NIMROD que viene haciendo bien las cosas hace rato.
Otra de las bandas que dijo presente es BOA, banda del recordado Gustavo “Caballo” Romero. Dan una nueva cuota de Groove Metal al escenario nacional, con un sonido sólido y poderoso, mostraron parte de lo que es su material.
Ya avanzada la jornada, llega el turno de SQUAD, clásica banda de Thrash/Crossover, liderada otrora por el gran Chris Castro, fallecido lamentablemente el año pasado. Mostrando parte de su material, esta vez en las voces Flack, el primer vocalista, el encargado de haber grabado el primer demo de la banda, el mítico Gallinazeous Death, el cual también mostró parte de su material. Pero en sí, se siente un poco rara esta formación de la banda, ya que muchos estaban acostumbrados a la voz y el carisma del Tío Chris en escena, y ahora como que no se logra lo suficiente.
Ya siguiendo con el cartel, fue el turno de uno de los números más esperados: POEMA ARCANVS. Sin duda, la calidad de esa banda es tremenda, con un sonido pulcro, mostrando su ya clásico Doom Metal, logró con creces lo esperado. Un show de primer nivel, sin duda.
Ya cerrando el cartel de este Hell Stage, es el turno de NUCLEAR. No merecen mayor presentación: sinónimos de calidad y poderío, de la mano de un afiatamiento de ya los largos años en escena y de numerosas giras al extranjero, logran mostrar su calidad interpretativa, con un tremendo frontman como lo es Matías Leonicio, dejando en claro cómo se debe tocar metal. Sin duda, un show impresionante.
Fue una buena jornada por parte del stage nacional, pero algo que acotar es que, en cierto modo, no reflejó lo que es la escena metal nacional. Bandas que podrían haber estado y que hubiesen tenido mejor resultado y haber sumado más cantidad de personas quedaron afuera, aun teniendo méritos suficientes como para estar presentes acá (salvo POEMA ARCANVS, NUCLEAR y NIMROD), que están presentes dentro del circuito de metal más tradicional. Se echó de menos el Heavy Metal, los cuales en Chile tenemos referentes de sobra y de buena calidad, pero se cumplió el objetivo.
Una vez más, THE METAL FEST volvió a levantar las banderas del metal en Chile, reafirmando pese a todas las dificultades que sigue siendo un bastión irrenunciable para los amantes del metal extremo, clásico y contemporáneo. A nivel técnico, el festival fue impecable: el sonido estuvo simplemente demoledor en ambos escenarios, con una mezcla clara y potente que permitió disfrutar cada matiz, desde los guturales abisales de NILE hasta los himnos históricos de SAXON y los cortes afilados de KERRY KING.
Si bien se sintió una merma en la convocatoria respecto a años anteriores posiblemente afectada por la saturación de conciertos recientes y la competencia feroz de otros festivales, la esencia de THE METAL FEST se mantuvo viva gracias a un cartel sólido, una producción de primer nivel y un público que, aunque en menor número, entregó toda su energía.
Esperamos sinceramente que esta no sea la última edición de este festival que ya es parte de nuestra historia musical. Chile necesita un espacio como este, que celebre y respete con orgullo el arte del metal en todas sus formas. Que vengan más ediciones, más jornadas épicas. Porque si algo nos dejó claro esta versión 2025, es que el metal en Chile sigue sonando fuerte y con el puño en alto.
Review por Octavio Ramos
Fotografías gentileza de: Jerol Salas, Miguel fuentes y @lacriatura